CIEGO Y DESESPERADO

CIEGO Y DESESPERADO

Una estatua de carne se levanta,
Cada ves que nos invade la tristeza,
Una estatua de carne se levanta,
Cuando la vida te debe muchas esas.

Te dan ganas que nos trague la tierra,
Ganas de arrancarnos las venas,
Tomar un sable y cortar con fuerza
La garganta y no volver a respirar.

Cada ves que me ahogo en la pena,
Me levanto con fuerza,
Me arranco del corazón la alegría,
Para reaccionar con ira.

Tengo la facilidad de sentir el arte,
Como dejarme caer por la melancolía,
Volviéndome eufórico, segado de éxtasis
y saltar de un rascacielos de lágrimas.

Ahí es donde se forma la fuerza,
Quebrando mi serenidad viva,
Para golpear al momento,
Vencer la tristeza
Vencer su tormento.

El odio crece en segundos,
Mi espíritu, es una línea,
Se desliza en mi espalda,
Se forman nudos de rencor,
Mi piel se enfría al igual que mis nervios,

Mi único objetivo superar el problema,
Respirando hondo y botándolo con fuerza,
Un nudo del espíritu con el frío se solidifica
Tomando forma humana, anhelando desfogarla.

Formando parte de la vida,
Forma parte de tu conciencia,
Convirtiéndose en una carga,
Un peso sobre tu espalda.

En honor a la amargura,
Por el placer del capricho,
La carne molestará con bravura,
Cada ves que recuerdes, está dicho,
Mirándote la cara y sus gestos.

Alégrate si encontraste la respuesta,
La estatua te ayudará en tus errores,
Recuerda, mas no llores,
Que siempre hay un puerta,

Patea, salta, crea e innova,
Sin dañar a las demás personas,
Porque la fábrica de estatuas
Sigue, continúa y nunca quiebra.

LUIS MIGUEL ROQUE RAMIREZ




para todo aquel que tiene problemas y no puede, tiene que superarlo, de eso se trata la vida de ganar experiencias y compartirlas, y lograr una mejor sociedad por el bien de todos