CARTA Nº 10

CARTA Nº 10

ANOCHECER- LA DESPEDIDA:

Para ser sincero, saber que vuela el viento;
ya no me siento el mismo,
estaba alcanzando un nivel
considerable en lo que era escribir,
pero habían cosas que me faltaban, y
aunque quería descubrirlas,
unas sombras me tomaban las manos
he impedía que siga avanzando,
sentía frío...,
sentía dolor...,
mi piel se cristalizaba,
y mi corazón anunciaba el fin
de un mundo viejo y añejo.

Mis manos, no respondían.
Llegaba un barco... a mi conciencia,
raptando al que creía
ser un romántico.

Se lo llevó, y fue un reo en el navío,
desesperado, mi corazón gritaba
por el vacío que fue invadido
en aquel instante.

Y se fue..., marchito,
ahora ya no era mi sòlo corazón,
sino una rosa blanca,
que sudaba expulsando sus perfumes
y su propio color rojizo,
ahora se hallaba pálida de la soledad.

Lo último que vio aquel
ser apresado, fue su hogar
que fue desprendido de sus brazos,
los poemas que de su lengua
aún no salían, en la noche,
la mirada de la cálida Luna
que a su amor de su musa se despedía,
porque mañana él la olvidaría.



LUIS MIGUEL ROQUE RAMÌREZ

CARTA Nº 9

CARTA Nº9

(Al soñar en el camino)

Las ropas del mar
Dejaron las huellas de sus brazos
sobre la escarpada
arena del desierto,
pareciera que hubieran
persona sepultadas
bajo las sàbana amarilla
que viste la arena.

Los cerros, titanes recostados
En un letargo sueño .
El viento sopla con fuerza,
Esparciendo a las nubes en un vaivén del mar.

Mis párpados están cansados,
Por euna sombra alada

que proteje el cielo,
Ahora se desvanece...,
y ahora se desvanece...,

Y mis ojos se rinden al entrar...,
en tu libro de sueños,

que el vacío habita en el eco

el la ancha grieta de mi corazón

que a mis manos hecharon a volar

las plumas de mi cuerpo,

si ríos de plata hacen tu piel

y la rosa, es el sol de tus labios

todo por una mirada tuya

donde cayeron mis ojos

a los inicios del tiempo.

LUIS MIGUEL ROQUE RAMÌREZ

CARTA Nº 8

CARTA N° 8

(A mi nuevas tierras)

¿Qué se dice al viajar?,
¿Qué se dice al extrañar?,
y se vive en el transporte
un tranquilizante momento.

Mi cuerpo paralizado,
es sumergido sobre un fondo celeste de cielo,
mis ojos se encuentran quietos
como las rocas y los árboles caídos
observando el cristal, ventanas de mis pupilas

El móvil gruñe,
porque se moverá a un nuevo destino,
¿Dónde queda aquel camino?
En el amor y el cariño, de mi madre,

Desde mil besos hasta el fin del universo
Son dadas en un arrullo
De despedida esperanzada.

Siento que mi corazón
es desprendido de su lugar
quedando un vacío en las
venas y arterias.

Tacna, me voy de este lugar
Por un corto tiempo,
Ya han pasado quince minutos
Y sólo veo tus cerros.

Mi alma, mi espíritu
Y sentimientos dicen:
Que el extrañar se oye
en el silencio del viento
ausente, en el silbido de las brisas.



LUIS MIGUEL ROQUE RAMÍREZ

CARTA Nº 7

CARTA Nº 7

(A mi madre)

En mi alma se abre una herida mas
s brote de las flores, despojando un olor a tristeza
el eco trae el llanto de un niño, se oye en mi cabeza,
el dolor de un hijo, jugando con las espinas de su madre

Cortando mis ilusiones adolescentes
con lo filos de su boca indiferente
con el triste vacío de su silencio,
ocultando su meditabunda voz en su carisma.

Mamá, luz y sombra de mi vida,
nos hacemos tanto daño con la cuerda que nos une,
jugamos con ella, saltando en un círculo sin sentido.

Mi intención es alegrarte en tus momentos decaídos,
y al intentarlo consigo todo lo contrario,
seré una persona mas en tu vida, como el pasar de los días.

Sabes, te agradezco por todo,
por las aventuras en la magia d tus cuentos
por los cálidos besos desde niño
que me embriagan de tu sublime amor

Gracias por ser la guardiana de mis torpes pasos
y de las resbalosa piedras del tiempo,
y perdóname si te provoco amargos recuerdos.
porque no lees lo que escribo.

LUIS MIGUEL ROQUE RAMÌREZ

CARTA Nº 6

CARTA Nº 6

¿Porquè estamos lejos
en la distasia
del espacio añorado?,
¿porquè mi corazòn
late en el cielo
por los ojos tuyos
como si te estuvieran llamando?.

¿Por què, Por què...,
las brisas susurran
a mis oidos, tu voz tan dulce,
y las fragancias de tus labios
confunden mis sentidos
en un mar de rosales
con espinas de Oxìgeno
que emanan de tu piel?.

¿por què, Por què...?,
¿porquè, dime porquè?,
hoy es un dìa especial?,
si el firmamento estaba cubierto
de una inmensa sàbana blanca,
y cuando te recordè el sol
despertò soñoliento,
dàndome las esperanzas
de algùn dìa poder darte
el beso de la flor enamorada
que en mi alma descansa
esperàndote en el recinto
de mi cama olvidada.

¿cuando te llevaste mis alas,
angel de las sinceridad?

LUIS MIGUEL ROQUE RAMÌREZ

CARTA Nº 5

CARTA N º 5

Esos labios, son rojos como el beso
de una rosa, y mil rosas como
los abrazos del càlido sol, en el tardecer
romàntico llamado, ocaso.

Por què te sonrrojas amiga mìa,
si las palabras estàn hechas para tì,
porque el mar tieme tu nombre escondido
en la profundidad de los secretos del amor.

¿La noche es azul oscura
como si guardara un misterio,
o es que dejaste tu velo
cubriendo el cielo ?.

La luna es la sierva de las
puertas en los cabellos tuyos;
cuando escapè de los sueños
a la realidad, me dije a mi mismo
que hoy serìa un dìa muy diferente.

Hay un loco enamorado
que acecha mi juicio, cautivo
del ser romàntico, y el cantar de tu
ojos reflejan en el mismo mar
en las noches de luna llena,
las aves caen impregnadas
y se convierten en estrellas
sobre la planicie de la noche vacìa,
tan sòlo son sueños, sueños.

Sueños de poderte admirar y que
me enseñes lo que es el sentimiento
y el manantial de donde
nacen las oraciones diluìdas palabras.

LUIS MIGUEL ROQUE RAMÌREZ

CARTA nº4

CARTA Nº4

(LA ÙLTIMA VEZ)

hasta mañana te dirè por siempre,

hasta nunca, por el corazòn

que ahora le ganò la guerra a mi razòn,

la amistad se apodera de mi mundo.

nace una vida, y en mi una idea

loca, sobre el fondo violeta

de mi espìritu extasiado, la emociòn

me sacude de las sàbanas de mi piel,

por algunaves volverrte a ver.

siento volar al estar parado

en la punta de un presipicio olvidado,

me recuesto sobre el viento

para podernos percibir.

Estarè sobre el aire,

estarè sobre el agua,

estarè en el fuego,

y en tus huellas,

por que tambièn soy tierra,

y en las vidas, deseos y recuerdos.

A Dios

Adios

LUIS MIGUEL ROQUE RAMÌREZ
(Escrìba de la naturaleza)

CARTA Nª3

CARTA Nº3

( A mi amigo)
ya no importa, el tiempo lo cura TODO.

y de que vidas podemos hablar,
de la edad que tenemos,
que vida podemos dedicar,
cuando aùn nos falta por apreder,si, en efecto,
la tristeza me invade, y me ahogo en un mar
de copas.

sobre el sol o la luna,
descansarè donde sea,
porque solamente soy su expresador,
soy su escultor en la palabras mìa dedicada a ella,

¿que harè en el pozo de la noche de donde
saco el agua de mi vida?, si la luna
son sus ojos que se reflejan en el manantial
de mi alma, y ahora ya no tengo vida.

vuelo a ser el mismo loco que me conocen,
que llora tras las puertas, y es eufòrico al volar
con sus amigos,- tan sòlo mìrala-, ya somos
dos mas que hemos caido a sus pies,

pero el orgullo me està venciendo,
como esas palabras de lluvia besan su piel;
ahora dèjame volar en el èxtasis y el desenfreno
del desfogo,

dèjame que me sumerja
en las canciones de la opera alusiva,
que nuestro grupo hoy se desintegra.

las palabras de los poetas son hermosura
al dedicàrselas a ella.
como siempre ella, muy linda

que son blancas palomas la que las visten y la adoran.

hay rencor, mas que una sonrrisa de un viejo amigo

y la lecciòn que patas en la vida que en quièn se puedan confiar.

LUIS MIGUEL ROQUE RAMÎREZ

CARTA Nª2

CARTA Nª2

pero disculpa, es que es muy profundo
el temor de volver a perder
esos ojos de luna nueva,
el universo se perdiò en el vacìo,
en el fondo de tus pupilas negras,

es desesperante no poder tocar
esa piel del mundo quimèrico,
nostalgia, crece en mi cuerpo como
flores en la primavera,
mi razon, ya no la tengo, porque se perdiò en el
mar de tus cabellos,
mi juicio se extraviò en los sueños tuyos, buscando
el sabor de tus labios,

-¿que mas puedo desear?- grita mi conciencia,
y enloquesco cada dìa, cada noche,
oyèndose una triste y reprimida canciòn
susurrando en mis oìdos,
llamados y gritos del mas allà,
que me impulsan a las orillas del mar
claro està, esas voces se llaman "deseos",

¿deseos de que?,
deseos de que
deseos de queee...,
mi corazòn se pierde en una selva andròmina,
mis làgrimas de añoranza son llevadas por el
consuelo y las brisas de la esperanza
de algun dìa poderte ver.

Mis fuerzas me dejan, despues
de haber hecho el gran esfuerzo de esculpir
tu rostro en las nubes, y de construir
tu nombre en las estrellas,

-¿que deseas entonces?-me gritan los astros;
ni yo mismo sè lo que quiero,
percibo mil truenos sobre mi piel,
al ver tus fotos, que son de colecciòn
en los recuerdos de mi memoria;
que anhelo tengo, si en el paraìso
sòlo hay amor de hermanos,

estas en todas partes, todos lugares,
y mi alma se enciende,
se quema, arde el fuego glorioso,
y darte mil besos con estas cartas de mi amor.


LUIS MIGUEL ROQUE RAMÌREZ

CARTA Nª1

CARTA Nª 1

A los años me arrogaste,
a los recuerdos me lanzaste,
sin pensar que el viento
de mi boca fluye para despertarte.
No, no es locura, cuando
mi cabeza se descascara al recordarte,
no, no es masoquismo,
cuando adhiero tu foto
al firmamento pensativo.

Una carta al vacío es entregada
por el mensajero melancólico de mi voz
que te extraña, y se embriaga
con el llanto de la pena.
La noche es oscura
al abrir el álbum de mi mundo,
el día atardece cuando encuentro
tus fotos sobre la mesa
del tronco talado de mi corazón partido.
Sobre la cama de nubes de algodón,
sobre mis sillones de paja,
cada mañana me despierta el sol
con el beso de tu mirada.
Cada ocaso, se despide la tarde
con tus labios de ternura añeja;
anduve en mil siglos tratándote de buscar,
y llegaste a mi como gotas en la lluvia.
Podría escribirte aún más,
y darte las gracias por ser una buena amiga,
y darte las gracias de soplar mi tristeza
como un libro viejo y empolvado.


LUIS MIGUEL ROQUE RAMÌREZ

Y quiero hacerte un pregunta,
¿quièn es el autor del poema que has escrito?,
no te vayas a molestar, està adornada de hermosura.

El texto de tu boca, puedo leerlas, tus palabras,
que llevò a mi imaginaciòn a viajar
a un mundo de quimeras
en la naturaleza de tus ojos de mujer.


LUIS MIGUEL ROQUE RAMÌREZ