miércoles, 25 de julio de 2007

PARAÍSO MUJER




Cierra los ojos un momento
E imagínate este sueño,
Algo irreal, un tormento,
Verte a diario, y yo mas lento.

Eres el desierto suave
Junto a las cascada
Y el mar que nos atrae,
Siguiendo mi camino.


Estoy frente a ti mirándote,
Impresionado por tus ojos,
Grandes, fijos y negros,
Estoy frente a ti tocándote,

Estoy en la noche,
Y en el desierto,
Atónito y admirado,
Tú belleza natural.

Me encuentro en un bosque,
Largo suave y negro,
Bosque liso que se asemeja al mar
Suaves y negros cabellos

Siguiendo mi camino,
Me encuentro en el bulbo
de una inmensa rosa,
los confundí con tu boca,

y el aroma que seduce,
me hace caer al los pétalos,
suelo rojo y sagrado,
y el instinto que me produce,



beso la rosa,
beso tus labios,
labios de miel,
labios olor azucena,

siguiendo mi camino,
bajo las ricas quebradas,
y me detengo, me encuentro,
en un camino corto y acaramelada

al bajar, tres senderos,
dos largos en los costados,
y en el medio el mas venturoso,
de recorrer quisiera los lujuriosos.

miro al frente dos grandes montañas
que se asemejan a tus pechos
y subiré a la cima para santificarlas
porque el destino me puso en mi lecho

chocamos con pasión, tus labios con los míos,
mi boca se desliza por tu cuello,
mis mejillas se apoyan en tus senos
hasta llegar al vientre, tan esperado por mis sueños


desde el desierto plano,
a lo lejos se observa,
que parten desde aquí,
dos largos y curvos caminos,
y de donde estoy,
un suave deslizamiento,
acompañado de un bosque,
suave curvo y sedoso,
se parece a una cascada
inmensa en el fin del mundo,
cayendo de bajada.




Y al bajar de la cascada,
Encontré lo que anhelaba,
Recorrí todo un desierto
para llegar hasta aquí,
tu hermoso oasis

descendí desde la cima
para llegar a la única
y maravillosa mina,
de la eternidad
y cumplir la ley natural
introduciré mi llave,
para abrir las puertas
a un alma a este mundo
y nasca un nuevo amor,
de la cueva nacerá nuestro
querido y pequeño gran amor

LUIS MIGUEL ROQUE RAMIREZ

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